CHABOLA con toda el alma, nace del amor heredado por el campo que durante más de 50 años hemos dedicado como familia a cultivar Cafés Especiales.

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El amor por nuestras montañas y sus raíces han logrado que podamos vivir de nuestro legado:

 

una tradición cafetera por excelencia, donde el valor del trabajo se convierte en el alma de su gente y en el que sus manos son el motor que se enciende de fortaleza para cultivar estas tierras, lugar donde se recogen los frutos más dulces del mundo.